Cuando PURETi se aplica a cualquier superficie que recibe luz UV, descompone la materia orgánica a nivel molecular. Una aplicación dura años y proporciona una fuente constante de limpieza incluso cuando los medios humanos o mecánicos no tocan la superficie.
Las partículas en el aire se oxidan cuando golpean una superficie activada por la luz. Las ventanas, las lámparas y marcos de ventanas pueden formar parte de la solución de limpieza. En España, los centros quirúrgicos ambulatorios informaron recientemente sus puntajes de auditoría más altos en las salas tratadas con PURETi.